En momentos claves, donde el trabajador sufre de todos los ajustes que implementa el Gobierno de Macri, los titulares de la CGT brillan por su ausencia.
Cuando desde todas las demás centrales sindicales trabajan en un paro nacional, en protesta de todas las medidas en contra de los trabajadores argentinos, la mayoría de los representantes sindicales de la CGT siguen pidiéndole tiempo a sus representados para que el Gobierno trabaje en las mejoras laborales.
Al ingresar a la celebración de la central por el "Día de la Lealtad Peronista" en la famosa quinta de San Vicente, Carlos Acuña, integrante del triunvirato de la CGT, destacó como "muy importante" la reunión que tendrán con los representantes empresarios el miércoles y señaló que el eje del debate será "la economía y el empleo". El dirigente gremial adelantó que no se hablará de un monto universal para el bono de fin de año sino que "se pedirá un piso para que cada gremios discuta de acuerdo como está su sector". También aseguro que "hay que darle tiempo al gobierno nacional para que demuestre su plan económico" y, aunque evaluó que "los trabajadores no están siendo beneficiados", pidió no "desacreditar" la gestión de Cambiemos. "Tenemos que aguantar al presidente 4 años nos guste o no nos guste", analizó.
Por su parte Luis Barrionuevo, secretario general de los Gastronómicos, aseguró tener "muchas esperanzas" por la reunión que mantendrá el miércoles el triunvirato de la CGT con representantes empresarios para llegar a un acuerdo por el bono de fin de año, que debería ser un pago universal de "dos mil pesos". En cuanto a los 1000 pesos para jubilados y beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo, consideró: "Creo que el gobierno ha dado lo que tiene". Dijo que la central obrera "está actuando muy bien" porque el gobierno de Mauricio Macri "necesita un apoyo, no eterno" pero sí de "no menos de dos años para que puedan llegar los capitales".
Barrionuevo, quien alguna vez había advertido que "hay que dejar de robar por dos años", insistió en que a Macri "hay que ayudarlo" porque "necesita un tiempo para acomodar el déficit" del gobierno anterior.
De cara a la reunión del miércoles, Barrionuevo pidió que la patronal responda "con el corazón y no con el bolsillo", y destacó que tanto Macri como la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal hablaron "desde el corazón" durante el Coloquio de Idea de la semana pasada en Mar del Plata. "El gobierno necesita consenso; sólo con la política de los CEO no se puede sacar el país adelante", concluyó.
Los trabajadores van por un lado y sus representantes sindicales por otro, mientras tanto el bolsillo de la clase trabajadora ya perdio mas del 12 por ciento de su poder adquisitivo.
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